El programa se inició en octubre del año pasado, cuando Gerdau AZA y la Ilustre Municipalidad de Isla de Pascua firmaron un convenio destinado a inculcar la cultura del reciclaje en esa posesión insular.

La ingeniero de proyectos medioambientales de Gerdau AZA, apoyada por una delegación que la ONG Casa de la paz, viajó a Rapa Nui, para realizar una serie de capacitaciones de reciclaje y un operativo piloto, para retirar la chatarra existente en las casas de los habitantes de la Isla.

A las charlas asistieron las máximas autoridades de Rapa Nui, la alcaldesa, Luz Zasso Paoa; el gobernador Petero Edmund Paoa, además de representante de la cámara de comercio y turismo, servicios sanitarios y la Dirección General de Aeronáutica Civil.

También se dictaron charlas a niños de quinto y sexto básico de los colegios de la Isla, como una forma de empezar a sensibilizar a la población sobre la importancia del reciclaje.

Este es el objetivo final del programa, ya que la Isla tiene serios problemas para la disposición final de sus residuos sólidos. Al ser una zona afectada por el dengue, cualquier residuo que se envía el continente, debe cumplir con una estricta cuarentena de un año. Esto ha significado que la chatarra acumulada esté aumentando peligrosamente, afectando el balance ecológico de este territorio declarado Patrimonio de la Humanidad.

Gerdau AZA se comprometió, además, a entregar una máquina compactadora de chatarra, que facilitará cumplir con la cuarentena y su transporte al continente

Gerdau AZA se comprometió, además, a entregar una máquina compactadora de chatarra, que facilitará cumplir con la cuarentena y su transporte al continente. El traslado de la máquina y su puesta en marcha, se estima se realizará durante el tercer trimestre de este año.

La sensibilización de la población partió con el pie derecho, ya que durante el operativo de reciclaje piloto, realizado el 30 de abril, se juntaron entre 6 a 7 toneladas de chatarra. Todo este material se encontraba en el patio de las 150 casas visitadas.

Para el momento de la puesta en funcionamiento de la máquina compactadora, se realizará un nuevo operativo de reciclaje, pero esta vez el objetivo es cubrir la totalidad de la población permanente de la Isla, que consiste en 4.000 habitantes.

Se desarrollará, además, un programa educativo llamado 5S, que busca fomentar el orden y la limpieza, para evitar que este precioso y único ecosistema termine colapsando debido a la contaminación.