Este tipo de jurisdicciones cuentan con prácticas administrativas, las cuales limitan la transferencia y el intercambio de información para fines tributarios con otros territorios. Las entidades de baja tributación son esas que emplean en su legislación tributaria una tasa de Impuestos Sobre la Renta más beneficioso en cuanto a las rentas generadas por los no residentes, siendo todo lo contrario a la tasa aplicable a los residentes.

Una de las ventajas más agradables de los paraísos fiscales es que les otorgan a las personas no residentes un trato fiscal con el cual se eximen un total de los impuestos que los inversionistas hayan generado por los capitales invertidos.

Según organizaciones de todo el mundo, los paraísos fiscales son esos territorios y países que tienen un procedimiento diferenciado respecto de los impuestos de carácter directo a acusar, rentas generadas por los residentes y no residentes.

Por lo general, este tipo de jurisdicciones son consideradas como herramientas por contribuyentes que hacen la práctica de elusión y evasión fiscal, es de aquí donde nacen las llamadas compañías offshore. Este tipo de sociedades deben ser registradas en un territorio en el cual no realicen ningún tipo de actividades económicas, solo gozan de los beneficios fiscales que dan esta clase de jurisdicciones.

La llamada Organización para la Cooperación y el desarrollo Económico, exige por medio del inicio de libertad positiva, que las llevadas a cabo entre piezas asociadas se realicen en equivalentes condiciones como si fuesen hechas con sujetos independientes. Asimismo, esto le garantiza que no logre existir un traslado de utilidades a jurisdicciones que cuenten con niveles de tributación subjetivamente bajos o nulos en las empresas del conjunto.

Para más información acerca de otros servicios, incluyendo la creación de sociedades holding, puede consultar la página web de Foster Swiss, consultora internacional para clientes inteligentes