Globedia.com

×
×

Error de autenticación

Ha habido un problema a la hora de conectarse a la red social. Por favor intentalo de nuevo

Si el problema persiste, nos lo puedes decir AQUÍ

×
cross

Suscribete para recibir las noticias más relevantes

×
Recibir alertas

¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Salud Redacción escriba una noticia?

Mantener una microbiota y una barrera intestinal sanas ayuda a prevenir el cáncer colorrectal

28/03/2023 17:51 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

Algunas bacterias se asocian con el inicio y la progresión del CCR, como son, entre otras, Helicobacter pylori, Fusobacterium nucleatum y Escherichia coli

La disbiosis es un desequilibrio en la microbiota que se asocia con el cáncer colorrectal (CCR), según indica la Dra. Carmen Margalejo Muro, que forma parte del equipo médico de Inmunomet, un servicio multidisciplinar dedicado a la asistencia de pacientes con malabsorción, intolerancias alimentarias y disbiosis intestinal. “La disbiosis con frecuencia altera la barrera intestinal, lo que produce una inflamación a ese nivel, así como carcinogénesis. Por tanto, se recomienda mantener una buena barrera intestinal y una microbiota sana para prevenir el CCR”, añade la experta, con motivo del Día Mundial del Cáncer Colorrectal, que se organiza el 31 de marzo.

Una serie de bacterias están asociadas al inicio y la progresión del CCR, como el Helicobacter pylori, el Fusobacterium nucleatum y el Escherichia coli, entre otras.

Los probióticos pueden mejorar la prevención y el tratamiento del CCR a través de varios mecanismos. Uno de ellos es la inmunomodulación, que es la regulación del sistema inmune por sustancias que estimulan o inhiben su función. Los otros dos mecanismos son la preservación de las funciones de la barrera intestinal y la inhibición de colonias de bacterias patógenas.

Tercer tipo de cáncer más frecuente

El CCR es el tercer tipo de cáncer más frecuente a nivel mundial y el segundo en mortalidad. En la actualidad, las políticas de salud pública están encaminadas a reducir estas estadísticas, especialmente a través de los cribados que permitan realizar un diagnóstico precoz. Otras vías de prevención, como ha comentado la Dra. Margalejo, son los hábitos saludables.

“De igual forma que hay bacterias asociadas al desarrollo de CCR, también encontramos bacterias que colonizan el tumor con más frecuencia y activan distintas vías de señalización que facilitan el crecimiento del tumor. Entre estas bacterias se encuentra el Fusobacterium nucleatum”, señala la especialista.

Aparte del CCR, la disbiosis intestinal se asocia con más de cien enfermedades crónicas, inmunológicas, hormonales, metabólicas, neurológicas y digestivas. Las investigaciones, no obstante, no han discernido si la disbiosis es causa o consecuencia de enfermedad.

Entre las patologías más claramente asociadas a la disbiosis se encuentran las enfermedades inflamatorias intestinales y los procesos funcionales digestivos, como el síndrome de intestino irritable. Las enfermedades sistémicas también podrían estar vinculadas con el desequilibrio en la microbiota.

Los probióticos pueden mejorar la prevención y el tratamiento del cáncer colorrectal a través de varios mecanismos, como la inmunomodulación

Se ha demostrado la existencia de factores psicoemocionales comunes en una serie de procesos crónicos sistémicos y los cuadros funcionales digestivos relacionados con la disbiosis intestinal.

Otras patologías crónicas relevantes que se asocian a la disbiosis intestinal son la fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica, el síndrome metabólico, las enfermedades autoinmunes y alérgicas, las dermopatías inflamatorias, la rinosinusitis crónica, las disfunciones ginecológicas, las mucositis orales, la cistitis intersticial, las infecciones recurrentes, la migraña, los trastornos del espectro autista y otras patologías neurológicas.

Diagnóstico de la disbiosis intestinal

La disbiosis intestinal se estudia mediante test microbiológicos y genéticos de muestras fecales. Los estudios microbiológicos se realizan con medios de cultivo selectivos o técnicas moleculares (PCR). Proporcionan información básica sobre posibles déficits o excesos de algunas especies bacterianas intestinales y hacen una estimación del número total de microorganismos.

Más recientemente se emplean los test genéticos o estudios de metagenómica fecal, que evalúan el microbioma o material genético del microbiota con una alta precisión diagnóstica.

Tratamientos personalizados

En cuanto al abordaje terapéutico, debe ser personalizado y protocolizado para combinar dietas adaptadas a cada paciente. También en los casos necesarios habrá que añadir terapias antimicrobianas, antifúngicos o antiparasitarios. Además, avanzan las investigaciones con ‘trasplantes fecales’, que consisten en la transferencia de microbiota y de los cuales hay diferentes posibilidades.


Sobre esta noticia

Autor:
Salud Redacción (31 noticias)
Visitas:
2015
Tipo:
Reportaje
Licencia:
Distribución gratuita
¿Problemas con esta noticia?
×
Denunciar esta noticia por

Denunciar

Comentarios

Aún no hay comentarios en esta noticia.