No es fácil encontrar un lugar en el mundo, nuestro lugar, nuestro huequecito.

No se trata en la mayoría de casos,   de ser famoso, tener prestigio o cualquier otra forma de orgullo o brillo social.

Creo que es algo más sencillo, como sentirse digamos reconocido como una persona que simplemente hace las cosas bien o lo intenta cada día.

Parece que eso sea algo natural, sencillo e incluso podemos pensar que es algo innecesario, pero pienso que no es así.

Ni ser reconocido es algo automático y sencillo ni es algo que sea innecesario porque hay muchas personas que no tienen altavoz.

Quiero decir que hagan lo que hagan, parece que no tengan una mínima relevancia y aunque parezca que sea algo que no es importante al final si lo és o pueda serlo.

Los años pasan y lo que ocurre es que si no sabemos vendernos y nadie lo hace por nosotros, parece que pasemos inadvertidos.

Y eso puede que sea bueno en algunas ocasiones, pero a la larga, encontrar nuestro hueco en el mundo, depende de que seamos reconocidos por nuestra labor.

Quiero decir, que eso marca la diferencia entre ser alguien digamos transparente o ser alguien que es visto y se sabe y valora lo que hace.

Se que es fácil pensar que ese ego, ese reconocimiento, nos lo tenemos que ganar nosotros a través de nuestra autoestima, no obstante eso no sea fácil y en muchos casos no podamos o sepamos hacerlo.

Ayudemos a que todos podamos sobrevivir en esta jungla y encontrar nuestro lugar bajo el Sol......

El autobombo le gusta y sabe hacerlo un porcentaje de personas que elevan su ego por encima de los demás, muchas veces por su valía pero otras muchas por su amor propio.

Y aquí llegamos a la pescadilla que se muerde la cola.. ¿qué es antes el ego o el amor propio? ¿Cómo reconocernos a nosotros mismos y darnos a reconocer en todos los ambitos?

Difícil respuesta a una difícil pregunta, nuestro lugar en el mundo debemos de ganarlo nosotros mismos, pero también es importante tener a personas allegadas que nos ayuden a sentirnos bien, con lo cual al vernos reconocidos nos crece la autoestima y logramos encontrar y reservar nuestro lugar en el mundo.

Estar constantemente en autoventa de uno mismo a mi me parece que es deplorable, a la par que me parece que es agotador y debería ser algo que nos avergüence y que haga que los demás nos avergüencen.

No obstante la sociedad muchas veces alaba al que se alaba, y eso es algo que no logro comprender, porque de la petulancia no debería salir nada bueno.

Seamos pues justos unos con otros y ayudemos a que los demás (los que se lo merezcan) logren su orgullo de ser como son, se sientan reconocidos y encuentren su lugar en la vida, en el mundo.

Amén. Así sea...