El semanario satírico Charlie Hebdo titula su portada "2017, al fin, el final del túnel", junto al dibujo de un hombre que mira por el cañón de un fusil, en un número especial que saldrá el miércoles, casi dos años después de la masacre en su redacción.

El fusil lo empuña un hombre iracundo que luce una larga barba negra, en un dibujo firmado por Foolz, miembro de la nueva generación de trabajadores de la publicación francesa.

El anterior equipo quedó diezmado tras el atentado del 7 de enero de 2015: 11 personas que se hallaban en la sede murieron en el ataque, perpetrado por dos yihadistas hermanos, Cherif y Said Kuachi. El ataque también le costó la vida a un policía, muerto cerca de la sede.

El atentado fue reivindicado por Al Qaida en Yemen, que dijo querer "vengar" a Mahoma, que había sido caricaturizado por el semanario.

Con ocasión del primer aniversario del atentado, la revista publicó una portada que mostraba el dibujo de un dios barbudo con un fusil de asalto al hombro y la leyenda "El asesino sigue suelto".