El presidente catalán, Artur Mas, acusó este viernes al Gobierno central de incurrir en un "abuso de poder", por impugnar ante el Tribunal Constitucional la simbólica votación soberanista del 9 de noviembre, y anunció "acciones legales" para combatirlo.

"El Gobierno central está actuando con abuso de poder y abuso de derecho. Está utilizando el Tribunal Constitucional de un modo impropio", aseveró Mas durante una comparecencia pública en Barcelona.

Por ello, el dirigente catalán anunció que pedirá a los servicios jurídicos de la Generalitat "estudiar posibles acciones legales contra el abuso de poder y de derecho del Gobierno español", para defender las competencias autonómicas sobre participación ciudadana.

La nueva votación del 9-N, con escaso valor representativo, fue anunciada por Mas el pasado 14 de octubre, después de cancelar el referéndum consultivo convocado inicialmente, suspendido por el Constitucional tras un recurso del Gobierno central.

Aunque permitirá a los catalanes interesados votar sobre la independencia, la votación no tendrá censo electoral ni organismo supervisor y será organizada por ciudadanos voluntarios.

En un principio, el Gobierno pareció desdeñar la maniobra de Mas, pero este viernes decidió presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional alegando que es una copia del referéndum suspendido inicialmente y que no cumple con las garantías democráticas de un proceso electoral.

"En solo 15 días, han pasado de hacer broma a presentar un nuevo recurso ante el Tribunal Constitucional. Han cruzado la línea del ridículo", arremetió Mas.

El alto tribunal debería reunirse la próxima semana para decidir si acepta a trámite el recurso, lo que implicaría la suspensión automática de la votación.

Defendiendo la legalidad de su iniciativa, el presidente catalán señaló que "no se puede detener" y llamó a la población catalana a dar el día 9 de noviembre "una gran lección de democracia y civismo". "No hacemos un referéndum encubierto, solo queremos saber la opinión de la gente", afirmó Mas.